Ver anterior: SOCIEDADES AMERICANAS ANTES DE LA CONQUISTA
Escultura de Guerrero
Aztecaa
Pero, igual que antes, sus bocas estaban por todas partes, mordiendo y gimiendo. Y todavía no ha cambiado. Bebe cuando llueve. Come cuando las flores se marchitan, cuando los árboles se caen o cuando alguien muere. Cuando alguien es sacrificado o muere en el campo de batalla, ella se bebe su sangre. Sus bocas siempre están abriéndose y cerrándose, pero nunca se llenan. A veces, por la noche, cuando sopla el viento, puedes oírla gritar deseando comer corazones de hombres y no se quería callar en tanto no se los daban, ni quería dar fruto si no era regada con sangre de hombre.
Mesoamérica: EL IMPERIO AZTECA
MESOAMERICA
Areas culturales de Mesoamerica |
Es la región del continente americano que comprende la mitad meridional
(sur) de México; los territorios de Guatemala, El Salvador y Belice; así como
el occidente de Honduras, Nicaragua y Costa Rica. Mesoamérica es un área cultural
con una gran diversidad étnica y lingüística. La historia de los primeros
asentamientos se remonta al 2.500 a. C. Desde entonces hasta 1519 fue uno de
los más importantes focos de civilización de la humanidad. Una de las áreas
más importantes durante la historia prehispánica fue la que se conoce como
Centro de México. Desde el siglo IX a.C. el eje del poder se concentró en esta
región, en ella florecieron y cayeron poderosos estados.
EL Imperio
Azteca
A comienzos del siglo XIV los Mexicas o Aztecas, un grupo venido del
norte, se instalaron en esta región. En el año 1325 fundaron su capital en el
centro del valle de México, la ciudad de Tenochtitlan, construida sobre una isla en el
lago Texcoco. Esta ciudad llegó a tener una población de 200.000
habitantes. Desde allí expandieron su
poder hacia otras ciudades- estado de la región. Los aztecas tuvieron una importante fuerza militar con la
que lograron una gran expansión territorial. Mediante guerras de conquista
conseguían nuevos territorios y poblaciones que brindaban tributos. La máxima
extensión de los dominios se produjo en tiempos de Moctezuma, el último
emperador azteca, hasta la llegada de los españoles.
Centro ceremonial de Tenochtitlán |
Los mexicas fueron una sociedad muy jerarquizada diferenciada en dos
grupos sociales. Los pilli (nobles) formaban
el grupo privilegiado. Este grupo estaba formado por los sacerdotes, los
guerreros y los funcionarios de gobierno. Poseían la propiedad de la mayoría de
las tierras, no pagaban ningún tipo de tributo (por el contrario se beneficiaban
de ellos) y controlaban el Estado. A este grupo pertenecía el emperador o
Tlatoani. Los funcionarios dependían directamente del emperador, controlaban y
centralizaban el almacenamiento de los productos recaudados en concepto de
tributos y, en épocas de malas cosechas o de guerras, distribuían entre la
población una parte de los bienes almacenados.
Los macehuales o trabajadores comunes constituían
la mayor parte de la población y formaban el grupo de los no privilegiados.
Este grupo estaba formado por los campesinos, los comerciantes y los artesanos
de las ciudades. Debían entregar tributos al Estado en alimentos y trabajo. La
entrega de una parte de lo que producían aseguraba la alimentación de los
sacerdotes, funcionarios y el emperador. Otra forma de tributo era en trabajo,
tenían la obligación de trabajar en la construcción de edificios y templos
pertenecientes a la nobleza.
En esta sociedad también había esclavos, personas que habían contraído
deudas o cometido delitos menores. También los prisioneros de guerra eran
esclavizados y se utilizaban para sacrificios humanos.
Tenochtitlán |
La agricultura fue la base de la economía azteca, y el maíz, la calabaza
y el poroto, los cultivos más importantes. La geografía determinó las técnicas
agrícolas que debían utilizar. La técnica de las chinampas (balsas con tierra
que flotaban en los lagos y sobre las cuales se cultivaba) era las más
utilizada.
Cultivo en chinampas |
El comercio
también era una actividad muy extendida. Intercambiaban productos, como el
cacao, gemas, algodón o preciosas plumas, con pueblos de diferentes regiones. La
actividad de los comerciantes no sólo tenía valor económico sino también
importancia estratégica, ya que actuaban como espías del estado.
Quetzalcoatl |
El Estado azteca fue un imperio teocrático, el emperador era considerado
de origen divino, tenía poder absoluto y
hereditario. Los sacerdotes
tenían a su cargo la preparación de las ceremonias religiosas y de los juegos
rituales, también se ocupaban de controlar el cumplimiento de las normas y de
hacer justicia. A los traidores, homicidas y violadores se los castigaba con la
pena de muerte.
La religión
era politeísta y formaba parte de cada momento de la vida de este pueblo, las
conquistas las hacían en nombre de sus dioses y en su nombre también realizaban
sacrificios humanos. Quetzacoátl, la serpiente emplumada, era uno de los dioses
principales de los aztecas.
ACTIVIDAD:
La Civilización Azteca
1) Organzá en un cuadro las características sociales, políticas y económicas del Imperio
Azteca.
2) Analizá
el mito que está a continuación y resolvé las consignas:
a) Definí el concepto de mito.
b) Sintetizá
en una oración el argumento del mito azteca de la diosa “Tlaltecuhtli”.
c)
Seleccioná una frase del mito que te ayude a argumentar la idea que expresás en
tu oración y explica por qué la elegiste.
d) Analizá
el último párrafo y explicá por que los aztecas realizaban sacrificios humanos.
En el lugar en donde viven los espíritus (Dioses), la diosa Tlaltecuhtli gritaba constantemente pidiendo comida. Tenía bocas en las muñecas, bocas en los codos y bocas en los tobillos y rodillas.
“Aquí no puede comer”, dijeron los otros espíritus. “Tendrá que vivir en alguna otra parte.” Pero arriba sólo estaba el aire vacío, y lo mismo sucedía a la derecha y a la izquierda, y delante y detrás. En aquellos días el mundo no se había creado. Sin embargo, por debajo había algo que parecía agua. Nadie sabía cómo había llegado allí. Los otros espíritus pensaron: “Si la ponemos abajo quizá pueda satisfacer su hambre”. Tan pronto se les había ocurrido el pensamiento, los espíritus Quetzalcoatl y Tezcatlipoca tomaron a la mujer y la arrastraron hacia abajo hasta el agua. Cuando vieron que flotaba, se transformaron en serpientes, se estiraron sobre ella en forma de cruz, desde el brazo derecho a la pierna izquierda y desde el brazo izquierdo a la pierna derecha. Tirando de sus manos y pies, la estiraron en todas las direcciones, empujando tan fuerte que la quebraron en dos por la cintura.
“Mira lo que hemos hecho”, dijeron, y de la mitad de las espaldas hicieron la tierra; y como no sabían qué más hacer devolvieron la mitad de abajo al lugar de los espíritus. “¿Qué podemos hacer con esto?”, preguntaron. “Qué pena”, dijo otro de los espíritus, “pero no importa, lo utilizaremos para hacer el cielo”.
Entonces, para consolar a la pobre mujer, todos bajaron volando y empezaron a hacer flores y hierba con su piel. Del pelo hicieron bosques, de sus ojos estanques, fuentes y pequeñas cuevas, de su boca, ríos y cavernas, de su naríz valles y montañas. Al final quedará satisfecha, pensaron.
Escultura de Guerrero
Aztecaa
Pero, igual que antes, sus bocas estaban por todas partes, mordiendo y gimiendo. Y todavía no ha cambiado. Bebe cuando llueve. Come cuando las flores se marchitan, cuando los árboles se caen o cuando alguien muere. Cuando alguien es sacrificado o muere en el campo de batalla, ella se bebe su sangre. Sus bocas siempre están abriéndose y cerrándose, pero nunca se llenan. A veces, por la noche, cuando sopla el viento, puedes oírla gritar deseando comer corazones de hombres y no se quería callar en tanto no se los daban, ni quería dar fruto si no era regada con sangre de hombre.
Fuente: REYES, Luis Alberto. El pensamiento indígena en
América. Editorial Biblos, Buenos Aires, 2008..
No hay comentarios:
Publicar un comentario