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Este blog es un espacio diseñado para los alumnos del nivel medio. Aquí encontrarán programas, contenidos y actividades de la asignatura Historia y Geografía. También podrán acceder a distintos recursos, diarios, películas, videos, textos, música y otros que contextualizan los temas desarrollados en clase.

Prof. Federico Cantó

sábado, 23 de junio de 2012

LAS SOCIEDADES DEL MEDITERRANEO

Ver anterior: CAIDA DEL IMPERIO ROMANO DE OCCIDENTE

Las culturas del mediterráneo

Mientras que en Europa occidental se estaban conformando los reinos romano-germánicos con población romana, gobernados por nobles de origen germánico, en el Cercano Oriente y en el norte de África también estaban sucediendo procesos muy importantes.


Las diferentes culturas del Mediterráneo.

En la región que antiguamente se dominaba Grecia y que luego fue conquistada por Roma, se desarrolló el Imperio Bizantino, también llamado Bizancio (476–1453), nombre que se dio al Imperio Romano de Oriente, luego de la caída de Roma. Los gobernantes de este Imperio recuperaron la cultura y el idioma griegos, que habían decaído luego de la conquista romana,y organizaron un sistema político semejante al de las antiguas monarquías de Egipto y Mesopotamia.

El comercio y la producción artesanal alcanzaron un desarrollo tan importante que el Imperio Bizantino se transformó en una potencia comercial y marítima, y se convirtió en el punto de contacto entre Europa occidental y los pueblos de China e India, en el Lejano Oriente.

Otro pueblo importante en esa época fue el árabe. Los árabes eran, en ese momento, un conjunto de tribus nómadas que vivían en los desiertos de la península arábiga y compartían un mismo origen y una misma cultura. Esos pueblos, organizaron un estado centralizado desde el siglo VII, teocrático, que se lanzó a la conquista de nuevos territorios en el norte de África y en el sur de España, donde permanecieron hasta 1492. Junto con la cultura y la religión impusieron el idioma árabe a los pueblos conquistados.

De esta manera, los pueblos del mar Mediterráneo quedaron repartidos entre dos grandes Imperios: el bizantino y el árabe, y varios reinos europeos que surgieron luego de la desintegración del Imperio Romano.

Extraído de Ciencias Sociales, 8º año, 3 er. ciclo EGB. Escuelas Rurales. Ministerio de Educación de la Nación.


viernes, 22 de junio de 2012

CAIDA DEL IMPERIO ROMANO DE OCCIDENTE

Ver anteriror: CRISIS DEL IMPERIO ROMANO - EL CRISTIANISMO

La disolución del Imperio romano de occidente

Durante el siglo IV, el proceso de disolución del Imperio Romano se aceleró. La crisis del siglo III, caracterizada por la anarquía militar, la decadencia comercial, el ocaso de la antigua religión, la difusión del cristianismo, la invasión de los pueblos bárbaros y la inseguridad de las comunicaciones contribuyeron a su disolución definitiva. A partir de ese momento, el mundo Mediterráneo comenzó a transformarse. Las características principales de esa transformación se manifestaron en los desplazamientos de gran parte de la población (que se trasladó a las zonas rurales) y en el fin de la centralización política del Imperio.

Europa y las invasiones bárbaras

La Europa actual se formó como resultado de invasiones de pueblos muy diferentes, que se desarrollaron entre los siglos III y IX y se llamaron, de manera genérica, invasiones bárbaras. Como resultado de esas invasiones, el Imperio Romano fue dividido en dos: el Imperio Romano de Occidente, con su capital en Roma, y el Imperio Romano de Oriente, con su capital en Constantinopla. A partir de esa división, comenzó una historia diferente para cada uno.

Desde el siglo III, los germanos, pueblos nómadas a quienes los romanos llamaron bárbaros, comenzaron a penetrar las fronteras septentrionales del Imperio Romano. Habitaban en el norte y el este de Europa y su actividad principal era el pastoreo y el aprovechamiento de los bosques, aunque no dejaron de formar pequeños pueblos y realizar trabajos agrícolas. Los germanos no eran un solo pueblo ni respondían a un jefe único. Cada pueblo germano estaba integrado por diferentes grupos unidos por lazos de parentesco.

Al principio, cuando se instalaron en las tierras del Imperio Romano, establecieron pactos de alianza: a cambio de reconocer a las autoridades romanas, grupos de germanos se incorporaron al ejército romano y sus jefes se convirtieron en oficiales y recibieron tierras. Sin embargo, desde el siglo IV, la invasión de los germanos se hizo más violenta.

Otros pueblos que llegaban desde el centro de Asia comenzaron a ocupar su territorio. Eran los hunos, un pueblo de jinetes nómadas que había comenzado a emigrar tres siglos antes desde el norte de China. Los hunos estaban organizados como una alianza de bandas de guerreros bajo la dirección de Atila, su jefe máximo.

Los germanos se vieron obligados a iniciar una nueva migración y, en el siglo V, su violenta invasión al Imperio Romano provocó la caída definitiva del Imperio de Occidente. Las invasiones continuaron en los siglos VI y VII y una multitud de pequeños y cambiantes reinos surgió en lugar del Imperio Romano de Occidente.

En cambio, el Imperio de Oriente pudo resistir a la invasión bárbara y se convirtió en el Imperio Bizantino.


Adaptado de C. Barros, B. Bragoni y otros, El libro de la sociedad en el tiempo y en el espacio,
EGB 7, Buenos Aires, Estrada, 1996.

ACTIVIDAD N°43:

1) ¿Quiénes eran los germanos y cómo era su organización social, política y económica?

2) ¿De qué forma se insertaron en la sociedad romana hasta el siglo IV?

3) ¿Qué impulsó a los germanos a invadir el territorio romano a partir del siglo IV?

4) Redactá en un breve texto la relación que existe entre: Hunos – Caida de Roma de Occidente


Ver siguiente: LAS CULTURAS DEL MEDITERRÁNEO

miércoles, 20 de junio de 2012

CRISIS DEL IMPERIO ROMANO - EL CRISTIANISMO



La crisis religiosa: Jesús y el cristianismo

La crisis del Imperio también se manifestó en la dimensión religiosa. A comienzos del siglo I, surgió una religión que con el tiempo reemplazó a la religión romana. En la provincia romana de Judea, territorio ubicado en el este del Imperio, vivía el pueblo judío. Practicaba una religión monoteísta, es decir que creían en un solo dios.

Por esa época, un habitante de ese pueblo, Jesús, se proclamó hijo de Dios y comenzó a predicar una nueva religión. Jesús no rechazaba la ley judía, pero predicaba una religión universal en la que tenían cabida todos los seres humanos, judíos o no. Recomendó amar a Dios y al prójimo, perdonar las ofensas y renunciar a los bienes terrenales. También proclamó que cualquier pecado podía ser perdonado por el arrepentimiento y que todos los hombres podían salvarse y alcanzar la vida eterna en el reino de Dios.

Adaptado de C. Gatell, C. García y otros, Sociedades, Ciencias Sociales 1 Er año, Madrid, Vicens Vives, 2002.

La propagación del cristianismo

Los problemas sociales, políticos y económicos que sufría el Imperio ayudaron a difundir el cristianismo. La nueva religión se propagó por la zona oriental del Imperio, sobre todo entre la gente humilde de las ciudades. El monoteísmo de los cristianos, su oposición al culto imperial y su negativa a enrolarse en el ejército los enemistaron con las autoridades romanas que comenzaron a considerarlos como un peligro para la estabilidad del Imperio. Por ello, los cristianos comenzaron a ser perseguidos. Muchos murieron proclamando su fe. La comunidad cristiana, al sentirse perseguida, desarrolló una fuerte solidaridad interna y, a pesar de los martirios, continuó extendiéndose. Celebraban su culto en casas particulares y en catacumbas.

Adaptado de A. González, A. Jáuregui y otros, Historia 1, Buenos Aires, Santillana, 1988.

La organización de la Iglesia

Las persecuciones obligaron a los cristianos a organizarse en sociedades cerradas. En cada ciudad formaban una asamblea o iglesia (ecclesía, en griego) y su culto era sencillo. Los fieles se reunían en una casa para rezar y leer los Evangelios. Las primeras comunidades cristianas, llamadas iglesias, desafiaban la estructura jerárquica de la sociedad, proclamando la igualdad de todos los miembros de las iglesias y rechazando las diferencias sociales entre hombres y mujeres, ricos y pobres, libres y esclavos.

Las iglesias practicaban la asistencia a los pobres y a los desprotegidos, se oponían a los sacrificios paganos y consideraban a los dioses tradicionales romanos como demonios que engañaban a los hombres. A partir del siglo II, se consolidó la jerarquía de la Iglesia al integrar en ella a nuevos sectores sociales acomodados. La Iglesia comenzó a constituirse en una institución gobernada por autoridades de distinta jerarquía. Hacia el siglo IV d.C, había alcanzado un alto grado de organización, prestigio y poder económico.

Esta situación llevó al emperador Constantino a promulgar el “Edicto de Milán”. A través de este documento, Constantino legalizó el culto cristiano en el año 312, y favoreció económicamente a las comunidades cristianas, liberándolas de pagar impuestos y realizando donaciones para la construcción de templos.

 El emperador Teodosio llevó hasta las últimas consecuencias la política de su antecesor y  en el año 380 declaró el cristianismo religión oficial y única del Imperio. De esta manera, inauguró la alianza entre el poder político y el religioso.

Adaptado de L. A. Romero y otros,  Historia de las civilizaciones antiguas y el mundo feudal. Buenos Aires, Puerto de Palos, 2006.

ACTIVIDAD N°42

   1)        Describí cuales son las características de la religión cristiana
   2)       ¿Por qué el cristianismo era una amenaza para el imperio?
   3)      Organizá en una línea de tiempo la evolución del cristianismo en el imperio romano.

CRISIS DEL IMPERIO ROMANO - EL COLONATO



La crisis del sistema esclavista: el colonato

A partir del siglo III, la actividad urbana y el comercio romanos decayeron progresivamente. Muchos artesanos abandonaron las ciudades, buscando seguridad y trabajo en las tierras de los propietarios de latifundios. Las guerras civiles y las invasiones bárbaras hicieron insegura la existencia en las ciudades. Los constantes ataques a barcos comerciales impidieron el intercambio en el Mediterráneo.

El final de las guerras de conquista por parte del Imperio significó, entre otras cosas, la pérdida de una de las principales fuentes de riqueza: los esclavos. Esta situación provocó escasez y, por lo tanto, encarecimiento de la mano de obra esclava. Ante la crisis, muchos propietarios de latifundios liberaron a sus esclavos, que se establecieron en las tierras de sus antiguos amos en calidad de colonos libres. Estos fueron la base de un sistema conocido como colonato.

El colonato consistía en que el propietario de un latifundio entregara al colono libre una porción de tierra, elementos de labranza y una parte de la cosecha para que el trabajador rural y su familia pudiesen mantenerse. A cambio, el colono debía pagar fuertes tributos al dueño de la tierra quien, de esta manera, aumentaba sus ingresos.

Dentro de la propiedad había también artesanos que producían lo necesario para el propietario, para los colonos y para los esclavos. Esto llevó a que las grandes propiedades se autoabastecieran y se apartaran de los circuitos comerciales. Así, el propietario se fue convirtiendo en un soberano que gobernaba en su tierra, sobre sus colonos y esclavos. Su residencia estaba protegida por murallas y se desentendía de las decisiones del poder central. Por lo tanto, a los funcionarios imperiales se les hacía muy difícil cobrar los impuestos en esos latifundios.

Cambios en la sociedad

La decadencia del comercio y del artesanado, así como el aumento de los latifundios basados en el colonato, provocaron una notable disminución de los ingresos del Estado. Ante la necesidad de seguir atendiendo a los crecientes gastos del ejército, de la distribución de granos y de la burocracia, el Estado decretó un aumento de los impuestos, que recayó básicamente sobre las clases populares urbanas y sobre los pequeños propietarios libres. Ello provocó la huida de artesanos y campesinos hacia las nuevas explotaciones agrícolas, donde buscaron la protección de los grandes propietarios y se convirtieron en sus colonos.

Esta movilidad de la población trastornó aún más el sistema fiscal del Imperio, puesto que hacía difícil calcular lo que debía pagar cada contribuyente. Por esta razón, el Estado decretó una serie de medidas por las que los colonos eran unidos a la tierra, los artesanos eran vinculados con su oficio y, finalmente, las profesiones eran declaradas hereditarias, de modo que el hijo era obligado a desempeñar el mismo trabajo de su padre.

Adaptado de A. M. Ballarini y otros, Trabajos prácticos de Historia,1º BUP,  Madrid, Akal, 1989.

ACTIVIDAD N°41:

  1)        Redactá textos breves donde establezcas la relación que existe entre:

a)         Colonato – Esclavitud
b)        Aumento de impuestos – latifundios
c)         Decadencia urbana – oficios hereditarios

LA CRISIS DEL IMPERIO ROMANO

Ver anterior: LA CULTURA ROMANA


La crisis del Imperio Romano

En el siglo II, el Imperio comenzó a mostrar síntomas de desintegración política: se debilitó la figura del Emperador y la de Roma como capital del Imperio, mientras que las provincias adquirieron mayor autonomía. Las fronteras del inmenso territorio imperial comenzaron a sufrir invasiones de los pueblos germánicos que las fortificaciones controladas por las legiones romanas no pudieron resitir. En diferentes momentos y lugares, ejércitos integrados por pueblos germanos cruzaron las fronteras, saquearon y ocuparon los territorios de las provincias. Eran los “bárbaros”, palabra que proviene del griego y del latín, y significa “extranjero”.

 ¿Qué es una crisis?

Para hacer referencia a los cambios que se producen en las sociedades en algunos períodos, se recurre al concepto de crisis. Con este término se caracteriza a una sociedad que está pasando por un período en el que se producen transformaciones y cambios traumáticos en la sociedad. Durante el período de crisis conviven aspectos de la sociedad anterior con elementos nuevos. La unión de ambos dará origen a una sociedad diferente.
Pero los cambios no se producen en forma repentina, demoran en manifestarse produciendo angustia y tensión social. Una crisis se puede manifestar en uno o en varios aspectos, como en la organización política del Estado, en las instituciones, los sectores sociales, la economía, la esfera militar, la religión y, también, en la sociedad y la cultura.

Factores que provocaron la crisis del Imperio Romano

La crisis política, social y económica del Imperio se agravó progresivamente porque:

• Los romanos dividieron en dos el Imperio para mejorar la administración.
• Los emperadores administraron mal el Estado, provocando gastos innecesarios y el
descontento de la población.
• El ejército se dedicó a luchar por el poder en lugar de cuidar las fronteras.
• Se aumentaron los impuestos para poder mantener un creciente sector de funcionarios
y soldados.                  
• La población de las ciudades se empobreció aún más, debido a la enorme presión de los recaudadores de impuestos; entonces, tendió a abandonar las ciudades y a radicarse en las zonas rurales.
• El comercio y la producción decayeron por el empobrecimiento de la población.
• Los ataques de los bárbaros perjudicaron aún más la producción agrícola, porque el Estado reclutaba campesinos para el ejército con el fin de reforzar la defensa de las fronteras. Este reclutamiento restó gente para trabajar en los campos.
• La inseguridad general provocó el aumento del bandidaje y la delincuencia en campos
y ciudades.
• El sector occidental del Imperio sufrió un proceso de decadencia que facilitó la entrada de pueblos bárbaros a Roma.

Extraído de Cuaderno de trabajo Nº 1, Ciencias Sociales, 8º año, Escuelas Rurales,Plan Social Educativo. Ministerio de Educación de la Nación.

ACTIVIDAD N°40:

1   1)        Definí el concepto “crisis”

   2)       Leé con atención los factores que provocaron la crisis del imperio y asociá aquellos que están relacionados entre sí.

   3)      Seleccioná los tres factores que consideres mas graves y justificá tu elección.

lunes, 18 de junio de 2012

LA CULTURA ROMANA


Ver anterior: ROMA Y LA EXPANSIÓN URBANA

La cultura romana

Los ejércitos romanos, organizados en legiones, avanzaron en su afán de conquista sobre todo el mundo antiguo. Junto con el ejército, los romanos llevaron a los lugares más recónditos del Imperio aspectos importantes de su cultura.

Los romanos adoptaron muchos elementos de la cultura griega. En los primeros tiempos, lo hicieron debido a la influencia de las colonias griegas situadas en el sur de la península itálica y, más tarde, como consecuencia de la conquista e incorporación de Grecia al Imperio. La influencia griega en la cultura romana se ven en la arquitectura, la escultura, la lengua y la religión de los romanos.

En su expansión en torno del mar Mediterráneo, los romanos difundieron una cultura que sintetizaba elementos de la cultura griega con sus propias experiencias y producciones. Por los caminos que partían desde Roma en todas direcciones, circularon la lengua romana (el latín), las leyes o derecho romano, sus instituciones políticas (la República y el Imperio), la forma de organizar una ciudad, el alfabeto y la literatura.

Este proceso se llamó romanización y fue la base del lento proceso de constitución de una cultura a la que se llamó occidental que, en muchos aspectos, permanece vigente en las sociedades contemporáneas.

Los habitantes de las regiones sometidas empezaron a aceptar la cultura de los romanos, a vestirse como ellos, a comprender, hablar y escribir el latín, a frecuentar las termas y los espectáculos públicos. Este proceso de romanización se desarrolló con mayor intensidad en las principales ciudades del Imperio.



ACTIVIDAD N°39:


1) Definí el significado del concepto “romanización”.


2) ¿Qué elementos de la cultura griega fueron adoptados por los romanos?


3) ¿Qué elementos de su propia cultura difundieron los romanos a los pueblos conquistados?


4) Por qué pensás que con el proceso de romanización los romanos se aseguraban la obediencia de los pueblos conquistados?


Ver siguiente: CRISIS DEL IMPERIO ROMANO


ROMA Y LA EXPANSIÓN URBANA

Ver anterior: El IMPERIO ROMANO

La expansión de las ciudades y la cultura romana

El Imperio requería disponer de una organización que le permitiese gobernar y desarrollar los recursos económicos de los territorios. Para ello fue muy importante desarrollar políticas de población. Para los romanos, como para la mayoría de los pueblos del Mediterráneo, el progreso estaba asociado a la fundación de ciudades. Así fue que se preocuparon por favorecer la vida urbana en los territorios que iban conquistando.

En Hispania, por ejemplo, otorgaron tierras a los nativos que vivían en los montes para que se instalaran en el llano, crearon colonias con población romana, fundaron ciudades nuevas y en ocasiones desarrollaron las que ya existían. Además, cada centro urbano tenía a su cargo el área rural que lo rodeaba. Quizá fue Mérida la más ostentosa de las ciudades fundadas por el Imperio, en la que se destacaba su imponente muralla. O Tarragona, que en su origen había sido un hospital del ejército romano y luego se convirtió en una ciudad erigida para rendir culto al emperador.

Los romanos dotaban a sus ciudades de sistemas de alcantarillado, acueductos para conducir el agua desde las montañas, termas, templos, anfiteatros, arcos de triunfo y otros monumentos. Las calzadas unían las regiones productoras de materias primas con los centros de comercio y con los puertos, facilitaban el control de los territorios conquistados y permitían, en caso de conflicto, el rápido desplazamiento de los ejércitos.


ACTIVIDAD N°38:

    1)        Justificá la siguiente frase : “ Las ciudades eran una necesidad del imperio romano”

    2 )     ¿ Cuáles eran las funciones de las calzadas romanas?
    
     ver siguiente: LA CULTURA ROMANA